El pinteño se dio un baño de multitudes antes unos 5.000 paisanos que se juntaron en la Plaza del Ayuntamiento de Pinto donde el ya ex – ciclista se dirigió a sus vecinos desde el balcón del Ayuntamiento.
Eran las 19:45 de la tarde cuando Alberto Contador llegó a la plaza donde nueve veces, aunque oficialmente sólo cuenten siete, ha ofrecido sus grandes victorias a sus paisanos.
Esta vez, Alberto lo hacía visiblemente emocionado y tras recibir los honores de las Autoridades de Pinto y entre una nube de periodistas, Alberto se dirigió a la planta de arriba donde centenares de pinteños y de gente venida desde otras zonas de Madrid esperaban ansiosas sus palabras.
Contador se mostró feliz y agradecido por todo el cariño y apoyo recibido, no sólo durante las tres semanas de la Vuelta, sino desde el día que anunció que la ronda española iba a ser su última carrera como ciclista profesional, hasta las muestras de calor y cariño de hoy mismo.
Aunque el grito ensordecedor de la afición pidiendo que corriese un año más era unánime, la decisión está ya tomada y por desgracia, Alberto Contador no volverá a subirse a la bicicleta para competir, aunque por su puesto seguirá ligado al mundo de la bicicleta.
Después, atendió durante uno minutos a los medios donde contó sus impresiones dos días después de colgar la bicicleta.
“Me gustaría meter estos momentos en una cajita y vivirlos dentro de unos años de nuevo” decía el pinteño ante los periodistas cuando le preguntaban por sus sensaciones en el día de hoy.
En referencia a lo que se escucha estos días de por qué no puede continuar un año más, Contador afirmó que esta Vuelta ha sido el momento perfecto para dejarlo: “me encuentro con energía pero a su vez hay que dejar espacio a los jóvenes”.
En cuanto a cómo vivió la épica etapa del Angliru, el madrileño se mostró reflexivo: “sabía que era mi última oportunidad para despedirme a lo grande y con una victoria, la subida del Angliru fue bastante dura con momentos en los que iba bastante atascado, pero había otros momentos en los que pensaba que me quedaban dos kilómetros para acabar mi carrera deportiva e intentaba disfrutar de cada momento”.
En esa subida, tanto Marc Soler como Enric Más, pusieron su granito de arena, “fue algo muy bonito, para que diera ilusión a la afición española; evidentemente con Purito, con Valverde o conmigo, el nivel del ciclismo español en los últimos diez años ha sido increíble y quizás estamos un poco mal acostumbrados en ese sentido”.
Por último, antes de hablar de los proyectos de su Fundación con las escuelas de ciclismo y la lucha contra el ictus, se refirió al próximo Mundial de Bergen, donde su nombre llegó a sonar: “es un Mundial que no se adapta para nada a mis características, si hubiera sido para escaladores quizás hubiera tenido alguna duda”
Sin duda se le echará de menos… pero tenemos sus gestas para recordarle.
Gracias Alberto.
SERGIO ANDRÉS.
