En las décadas de los sesenta y setenta, la Vuelta a España siempre estuvo irremediablemente un paso por detrás del Giro de Italia y del Tour de Francia, generalmente en cuanto a participación e interés por la misma de las grandes estrellas del pelotón. El arraigo del Tour de Francia, disputado desde prácticamente principios de siglo y la pasión de los italianos por su Giro, hacían difícil competir a la ronda española con estas pruebas. No obstante y aunque fuera a cuenta gotas, junto a los ídolos locales como Luis Ocaña o José Manuel Fuente y su escuadra el KAS, se pudo ver a Jacques Anquetil, Raymond Poulidor, Felice Gimondi e incluso a Eddy Merckx entre sus vencedores. Después de años de diversos problemas de índole económica, el Correo Español deja de organizar la carrera, siendo la de 1978, con triunfo de Bernard Hinault, la última bajo el paraguas del periódico vasco. Desde 1979 y hasta la actualidad Unipublic se encargaría de organizar la ronda española.
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