LA ETAPA QUE NOS DEBEN PERO MEJOR

DISTANCIA: 170 KILÓMETROS / DESNIVEL ACUMULADO: 5.698 METROS

 

En la tumultuosa edición de 2020 de la Vuelta a España el recorrido inicialmente previsto sufrió luego notables cambios por las restricciones derivadas del Covid, y de entre todos estos, quizás el caso más doloroso fue la suspensión de una gran etapa prevista con final en la cima del Tourmalet, que tuvo que ser sustituida el día anterior por la imposibilidad de transitar por Francia.

Fue de alabar entonces el trabajo de la organización, que en una situación tan extrema, fue capaz de reaccionar y ofrecer una etapa alternativa que además resultó entretenida. Pero nos encantaría poder recuperar la idea en una edición futura, incluyendo los dos puertos más importantes de los Pirineos, al menos históricamente.

No obstante, siempre somos exigentes y nos gusta repensar las propuestas de los organizadores para tratar de exprimir las opciones del recorrido. Es por ello que en nuestra  idea la subida al Portalet no es el primer paso puntuable del día, pues hemos incluido el paso por Hoz de Jaca, que permitirá que la escapada usual gane nivel entre sus integrantes, al actuar como filtro primario. No contentos con ello, y para dificultar un poco más las persecuciones, hemos añadido el paso por Lanuza, Sallent de Gállego y Formigal.

Tras recuperar la carretera con dirección a Francia sí que se respeta el recorrido original durante mucho tiempo, todo lo que queda del Portalet y el paso completo por Aubisque. En la bajada, tras la zona del Col du Soulor, existían las opciones de hacer un descenso más escalonado por Bordéres o incluso añadir la novedad de este año en el Tour, el Col de Spandelles, pero para no sobrecargar en exceso la etapa hemos preferido el descenso directo hasta Argelès-Gazost.

Donde sí hemos introducido una novedad es en el tramo entre los dos protagonistas de nuestro reportaje. Ese recorrido por el valle hasta Luz-Saint-Sauveur ha dañado últimamente las opciones de los valientes que se han querido mover antes del Tourmalet, por lo que creemos que no es mala idea incluir el paso por Viscos, que es una variante de Luz Ardiden, bajándose por la vertiente de ascensión habitual.

Por último no hemos sido radicales y mantenemos la vertiente clásica y no exploramos la carretera que parte cerca del aparcamiento de Barèges, también porque creemos que reduce un poco la dureza global de la subida, pero que apuntamos para emular algún día la propuesta para la meta de nuestra idea, que consiste en bajar hasta La Mongie y callejear para conseguir que la línea de meta este en subida. Un final apasionante que esperamos ver algún día en una etapa como la propuesta.