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Sinfonía en rosa

Al aficionado clásico al ciclismo se le enseñó que la manida “épica” era que en el ciclismo existiera agonía, alternancia de líderes, pasos difíciles, montañas hermosas y elevadas, distancias a recuperar, sprints a los que fuera difícil llegar y un sin fin de detalles más. Pues el recorrido del Giro 2020 hará las delicias de ese aficionado, sin olvidar las exigencias del “nuevo” ciclismo de espectáculo en metros finales agonisticos para arriba en rampas durísimas.

La carrera comienza con un viaje a Hungría. 3 etapas en el país magiar que servirán para dilucidar el primer líder en una crono corta con final en repecho y para comprobar quiénes son los lideres de los sprints en dos jornadas llanas.

Tras un primer descanso y de regreso a Italia, se celebran 3 etapas en Sicilia. Todas ellas cortas y todas con exigencia. La primera en una llegada en repecho en Agrigento. La segunda con la enésima versión de la llegada al Etna, siempre condicionada por el viento a pesar de su dureza. Y la tercera con un puerto de Segunda lejos de meta, que no impedirá un posible sprint.

Ya en la península de la bota quedarán 3 etapas hasta el segundo descanso. De dureza decreciente. Final en Camigliatello con paso por el Valico de Monteoscuro, puerto de 22 kms muy irregular, pero con 12 kms finales al 6,5%. Su cima está a 10 kms de la meta. Etapa llana en Brindisi y ondulada en Vieste con repechitos al final para adornar la etapa.

Segundo descanso y llega el turno de los muros y la media montaña. Final en Tortoreto Lido, con tres pasos por el murito de la ciudad, con rampas de más del 10%, y final cerca del último paso. Repechos camino de Rimini en la etapa más llana de la semana, y muritos y puertos cortos en la etapa de Censenatico, copiando la cicloturista “9 colli” con trampas por doquier y rampas de todos los colores. Al día siguiente nuevo final movido en Monselice con dos pasos de 4 kms al 5% cerquita de meta. Y para culminar la semana, la crono larga de la prueba. Llegada a Valdobiadene tras 34 kms de crono con un muro de 2 kms al 11% y por lo demás bastante llana. Jornada clave para la general antes de la primera gran jornada de montaña. Cuatros puertos, tres rondando la primera categoría y la llegada final en el durísimo Piancavallo, que ya vio volar a Pantani la única vez que se llegó allí.

Tras el descanso en la region del Friuli, etapa de media montaña con tres pasos por el muro de Ragogna, con 3 kms al 10%, que servirá para calentar para la siguiente etapa de montaña. 200 kms de etapa con dos especiales por el camino: Valbona (21 kms a casi el 7%) y Bondone (20 kms al 6,5%). Ambos lejos de meta. Para llegar a ella hay que pasar por el mucho más suave Durone Antes de llegar a los 15 kms finales al 7% hasta Campiglio.

No obstante no será la gran etapa de montaña. Al día siguiente vienen 205 kms de etapa con los pasos de Campiglio de salida, seguido del paso Castrin ( 8 kms finales al 8,5) y luego un largo tramo llano hasta el inicio del Stelvio. Larguísimo falso llano de aproximación para afrontar sus 25 kms finales al 7,45%. Uno de los grandes puertos de paso del ciclismo que no se afrontaba por esta vertiente desde 2005, provocando una pájara del favorito Basso. Se desciende y se acaba en Lago di Cáncano, una subida modesta, con porcentajes en torno al 7%. Cerca de 5000 metros de desnivel en una etapa muy exigente. Al día siguiente jornada llana camino de Asti con… 251 kms.

Será la antepenúltima etapa de la carrera, antes de la otra gran etapa de montaña. Alba-Sestrieres con 200 kms y 4 puertos de montaña. El impresionante Agnello, con casi 40 kms de subida, los 10 últimos a casi el 10%, coronándose a 2700 metros. Acto seguido, se sube el Izoard. Más bajo, más histórico pero menos duro. 14 kms a más del 7%, un buen lugar para buscar e ataque. Tras su descenso quedan las subidas a Montgenvre y Sestrieres. Tendidas, no muy largas, pero donde alguien con debilidad puede perder mucho tiempo. Será la última opción de voltear la general. Para los escaladores. Porque el día final en Milán hay una contrarreloj. Individual, plana y corta (16 kms) pero donde puede disputarse el podium o la carrera.

Una mezcla de montaña y crono, muros y llanos, puertos históricos y rampas nuevas. Un menú muy del Giro.