Aún cuando todavía faltaban bastantes kilómetros para que Philippe Gilbert llegase victorioso a la meta de Oudenaarde, uno ya percibía que este Tour de Flandes era mágico, era especial. Era único. Era algo que pasaría a la leyenda ciclista colectiva. De lo que en el futuro se hablará y no parará. Tendrá reseñas especiales en…