El australiano de Orica-Green Edge se ha adjudicado la victoria final en el Tour Down Under, del que también se lleva una victoria de etapa. Un inicio de temporada esperanzador para el actual líder del World Tour, que revive su victoria de 2012, cuando superó por escaso margen al español Alejandro Valverde.
Como ya hiciese aquel año, su intención es empezar muy fuerte para conseguir unas victorias que le den tranquilidad el resto de meses. Así, el líder del equipo australiano tiene como gran objetivo la París-Niza y las clásicas de las Árdenas, donde no ha podido brillar al nivel que se esperaba, a veces debido al desgaste que ya acumulaba, otras por pura mala suerte.
Habiendo ganado y sido protagonista absoluto (junto a Quintana) de la primera semana de competición al más alto nivel, ahora le toca afrontar un problema: todos los ojos mirarán hacia él, no tendrá margen de maniobra. Pero a él eso le importa poco, porque sabe escurrirse muy bien en todos los terrenos con la tranquilidad de haber hecho bueno y productivo su paso por este 2014.
Un 2014 que empieza muy fuerte para Australia, con tres ganadores de etapa en Porte, Evans y el propio Gerrans, una buena representación del presente y pasado de este emergente potencia en el ciclismo.
