El alemán ha comenzado 2014 sin victorias. Un hecho extraño, ya que desde 2011 se había convertido en el gran dominador de las pruebas contrarreloj en las que ha tomado la salida. Por el momento no ha podido pasar del tercer puesto, siendo superado por hombres como Michal Kwiatkowski y Alberto Contador en Algarve y por Malori, Cancellara y Wiggins.
Es cierto que todos ellos son buenos especialistas y que la derrota ante ellos no supone tragedia alguna, pero en 2013, sin ir más lejos, había dominado ambas pruebas. En Algarve, de hecho, quedó delante del polaco, haciéndose también con la general final. En Tirreno batió por 6″ al italiano de Movistar.
De hecho, la pasada temporada pudo ganar en todas las rondas por etapas a excepción de la Vuelta y el Tour de Pekín. Tirreno, Algarve, País Vasco, Romandía, Dauphiné y Tour de Bélgica. Además del Campeonato nacional y del mundo. Un año redondo en el que sólo el segundo puesto en la crono de Tarazona de la Vuelta a España le supo mal, más aún siendo batido por un Cancellara al que había tenido durante dos años desplazado al segundo lugar.
Sin embargo, no es fácil mantenerse al máximo nivel durante cuatro años. Su palmarés es envidiable y le sitúa como uno de los grandes contrarrelojistas de los últimos tiempos. De hecho, se encuentra a un sólo título mundial de Fabian Cancellara, que tiene el récord absoluto (4 victorias). He ahí su reto para 2014 y con el que cumpliría sobrado el año.