, ,

Alessandro Ballan: "Aún quiero ganar una París-Roubaix"

El italiano no ha tenido su año. Tras su grave caída y un periodo de recuperación lento y largo, sólo ha podido realizar tres días de competición en 2013. Ganador del Tour de Flandes y campeón del mundo, este veterano del Veneto no pierde la esperanza por volver a tener una vida deportiva normal. 

En un conjunto repleto de gallos la presión es menor, en tanto en cuanto el bagaje y peso de gente como Evans, Gilbert, Hushovd o Van Garderen aporta tranquilidad a la hora de reaparecer con todas las de la ley. Poseedor de una clase descomunal, la última imagen que ha llegado al aficionado es su lucha junto con Pozzato ante las exhibiciones de Tom Boonen en la temporada de piedras de 2012.

Obviando los graves sucesos que le han acontecido durante la última temporada, charlamos con él sobre su trayectoria, sobre clásicas, piedras, rivales…

Compañero de otro gran clasicómano, Gilbert, parece que se reparten los papeles. ¿Os complementáis bien? Tienes alguna victoria que él sueña…

Alessandro Ballan: Sí, de verdad. Ambos hemos ganado el Mundial, pero creo que los dos tenemos una carrera con muy buenas victorias por separado.

Tienes pocas victorias, pero ¡qué victorias! ¿Te gustaría tener más?

AB: Sí y no. He ganado poco, pero lo que he ganado ha sido en pruebas muy importantes. Espero poder seguir así, consiguiendo más resultados como profesional. He ganado doce, trece veces, pero ante grandes adversarios.

¿Es para ti una espina clavada no haber ganado en el Giro?

AB: Sí. Tengo más la espina de haber ganado poco en Italia. Sí, gané el Mundial en mi país, que es algo muy bonito, pero también lo hubiera sido hacerlo en el Giro.

Teniendo ya un tiempo de perspectiva, ¿fue positivo para ti el cambio de Lampre a BMC?

AB: Tuve problemas el primer año con el inglés, pero sí, la verdad es que estoy muy bien en este equipo.

En las clásicas te ha podido faltar un poco de suerte…

AB: Es que es muy difícil pelear contra la suerte. Cuando he corrido contra Boonen ha estado demasiado fuerte, imbatible. Un año pudimos haberle batido con Pozzato, pero era el más fuerte, poco se puede hacer.

¿Crees que ese año hubiese cambiado todo con Cancellara?

AB: Fabian, por su forma de correr, favorece a mis características. Aquella ocasión seguro que con él todo hubiese sido distinto… a mejor.

¿Qué victorias crees que te falta por conseguir?

AB: París-Roubaix.

Siempre que la salud te ha respetado has venido a la Vuelta. ¿Sólo por preparar el Mundial?

AB: Es una carrera muy bonita. Tiene buen tiempo, las carreteras que nos ponen no son demasiado peligrosas… Y también porque es la preparación ideal para el Campeonato del Mundo.

En tu primera participación, sin ir más lejos, ganaste una etapa dantesca de alta montaña, en La Rabassa. ¿Qué recuerdas de aquel día?

AB: Recuerdo de aquel día mucha, mucha lluvia. Una escapada muy larga, la última subida al puerto solo… Lo recuerdo con mucha alegría porque fue mi primera victoria en una vuelta grande y más por ser una etapa de montaña.

Imaginamos que muy diferente a cuando llegaste a la meta del Tour de Flandes de 2007…

AB: Era mi primera clásica ganada, llevaba sólo tres años como profesional. Fue toda una sorpresa para mí, no me lo esperaba.

¿Nunca te ha pasado por la cabeza hacer la general de una grande?

AB: No. Pienso que para mí es algo muy difícil porque mi cuerpo está adaptado a las subidas cortas y las pruebas de un día. No creo que lo hiciese a las tres semanas.

¿De dónde viene tu pasión por las clásicas?

AB: Simplemente porque en mi primer año las corrí y me seleccionaron para ir a las clásicas del norte. Pude probarlas y pronto descubrí que esas eran mis carreras.

¿Y por el ciclismo? ¿Cómo empezaste y por qué?

AB: En casa tenía una bicicleta vieja que me regalaron y salía a montar con mi padre. La utilizaba para ir al colegio y después pronto empecé a ir a las carreras. Era muy bonita, con flores.

¿Qué ídolos tenías en la infancia?

AB: Se podría decir que los italianos porque he crecido con ellos: Fondriest, Bugno…

¿Tienes alguna montaña favorita? En Italia tenéis muchas. Vale también para verlo por la televisión. 

AB:  Por ejemplo, me encanta el Monte Grappa, que además está cerca de mi casa. Tiene muchas vertientes, muchos kilómetros de subida y es muy duro. Pero prefiero no subirlo en carrera.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *