EL FICHAJE DE ALBERTO CONTADOR POR TREK

Cuesta creer el sinfín de circunstancias que han concurrido históricamente en los equipos en los que ha militado Alberto Contador. Con todos esos antecedentes, una de las incógnitas de este final de temporada era conocer en qué equipo iba a competir el de Pinto durante la próxima campaña. Tras multitud de rumores e infinitas especulaciones, será en Trek donde lo hará.

Durante esta temporada 2.016, los equipos más capacitados para obtener triunfos en las grandes vueltas de tres semanas han sido los que efectivamente se las han llevado. El Tour para Sky, el Giro para Astaná y la Vuelta para Movistar. De cara a la temporada venidera, seguramente habrá que contar también con el Bahrain-Mérida, tras el fichaje de Nibali y de otros ciclistas de renombre.

La cuestión para Alberto Contador se reducía a que ni podía fichar por Sky, con un líder como Froome, ni podía fichar por Movistar, con otro líder como Quintana. De Astaná, que perderá para la próxima temporada a Vincenzo Nibali pero mantendrá a Fabio Aru, podrían quedar ciertas dudas. No sabemos si Astaná habrá tenido ninguna intención de ficharle, pero está claro que los antecedentes de lo sucedido en 2.010 no aconsejaban su fichaje; ni para el propio Astaná ni para Contador.

Así las cosas, partiendo de esa base de que, de entrada, su futuro equipo no iba a ser ni mucho menos el mejor con el que se puede afrontar una vuelta de tres semanas, a Contador no le quedaba más opción que elegir de entre lo que restaba y se interesase por él. Él. Un ciclista que pese a llamarse Alberto Contador, está en el final de su vida deportiva.

Duele, casi en el final de su carrera deportiva, que un ciclista con las cualidades de Contador no haya podido tener a su disposición unos entornos tranquilos, con unos gregarios fieles, con calidad por lo menos para equipararse con los gregarios de los equipos rivales. Unos entornos en los que él solamente hubiera debido dedicarse a entrenar y a engrosar su palmarés. Pero ese cúmulo de circunstancias que le han acompañado lo han impedido. Lo que más cuesta de entender es que, a pesar de su calidad, Alberto Contador haya estado casi más en situación de esperar a si era él elegido para correr en un equipo, en lugar de poder elegir él en qué equipo correr. Por supuesto, todo circunscrito a los equipos con garantías de victoria en una gran vuelta de tres semanas.

Una vez elegido Trek, las especulaciones giran en torno a qué le puede ofrecer ese equipo a Contador en las grandes vueltas. Así de entrada, la pata más coja de esa escuadra puede ser la alta montaña. Por lo menos si se le compara con los grandes rivales. La actuación de Mollema durante el pasado Tour y su victoria en Donosti también plantea dudas acerca de si va a aceptar o no un papel de gregario de Contador. O incluso siquiera si va a correr el Tour. Si no elegirá disputar el Giro. Sobre Pantano, si finalmente se confirma su fichaje, también surgen dudas. No se le conoce todavía esa faceta de gregario. Sobre Felline y su confirmación para ser un baluarte en grandes etapas de montaña también hay dudas… Las dudas sobre Zubeldia son referentes ya a su edad. En donde parece sin discusión que Alberto va a salir ganando es en las etapas de contrarreloj por equipos y en las que no son de alta montaña. Otros ven en el fichaje de Degenkolb algo así al papel de Sagan durante el pasado Tour, y que implique que los recursos del equipo se repartan… Algunos apuntan incluso que va a salir ganando en la fiabilidad de los gregarios y en que, ya de por sí, Trek es un entorno más tranquilo que Tinkoff.

Evidentemente, todas estas especulaciones carecerán de sentido si las fuerzas del campeón de Pinto fallan. No obstante, durante esta Vuelta 2.016 ha sido palpable la superioridad de Quintana y Froome sobre él en los enfrentamientos directos. Y si además, el equipo no parece superior al del inglés y al del colombiano…

@ranbarren

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