El irlandés y el polaco serán de la partida en Belfast el próximo mes de mayo en la primera grande de la temporada. Ambos serán los líderes de un Tinkoff-Saxo en el que no estará el líder natural de la escuadra, el español Alberto Contador.
Con muchas ganas por tratarse de su Irlanda natal, el quinto clasificado en la pasada Vuelta será uno de los candidatos a subir al cajón final del Giro, aunque no lo tendrá sencillo con un recorrido repleto de llegadas en alto y varios escaladores de postín con la maglia rosa entre ceja y ceja. Entre ellos estará Daniel Martin, que no se perderá la ocasión de correr una gran ronda por las carreteras de su país.
Roche tiene una buena oportunidad puesto que la montaña no es excesiva en cuanto a su dureza y se incluye una larguísima contrarreloj que le beneficia por encima de otros hombres fuertes en montaña. El peor día para sus condiciones será el Zoncolan, anclado en la penúltima jornada. Aunque, como demostró en el Angliru, sabe sufrir y llevar su cuerpo al límite cuando tiene algo entre manos.
Acompañará al hijo del mítico Stephen el joven valor del ciclismo polaco, Rafal Majka. Ya con una experiencia en la corsa rosa y como séptimo clasificado, el de Zegatowice buscará sin presión mejorar sus prestaciones y crecer para convertirse en el gran escalador que deja entrever.
Entre los dos conformarán una buena punta de lanza de un buen equipo en el que se presupone que saldrá el recién renovado Bruno Pires, que pese a que reconoce no haber pasado su “mejor temporada”, le han demostrado que confían en sus posibilidades.
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