Historia de la Vuelta Andalucía

Se trata de la tercera carrera más antigua de España tras la Volta (1911) y la
Itzulia (1924), ya que su primera edición se celebró en 1925, con victoria para Ricardo Montero, que sería también campeón de España en ruta ese mismo año. Era hermano de Luciano Montero, que fue el primer español en ganar una medalla en un Campeonato del Mundo.
La organización de la prueba corre a cargo de Deporte Internacional S.A. “Deportinter”. Creada en 1925 por el entonces secretario de la Unión Velocipédica Española, Miguel Artemán, diseñó junto a Ciclosport sevillano 5 etapas con un total de 735 kms, con parada en Córdoba, Málaga, La Línea, Cádiz y Sevilla, inicio y final. Sus 38 participantes fueron nacionales e independientes.

Se disputó del 28 de octubre al 1 de noviembre. Sin embargo, la prueba no volvería a
celebrarse hasta 30 años más tarde, en 1955, cuando la recuperó la Asociación Ciclista Malagueña. Aquella edición, con salida y llegada en Málaga, celebrada del 30 de enero al 6 de febrero, contó con la participación de 86 ciclistas (Loroño, Bahamontes, Bernardo Ruiz, Timoner, Poblet, Langarica…) y el primer extranjero de la historia de la ronda, el marroquí Mizmizi Abdelkader. El vencedor final el egabrense Gómez del Moral, primer profeta en su tierra. Segundo fue Salvador Botella, primer ciclista español en ser líder del Giro, al vestir la maglia rosa en 1958.

Al año siguiente dicha Agrupación se fusionó con la Peña Malaguista y comenzó a asentar la carrera con ayuda de las instituciones andaluzas y el desarrollo de la Costa del Sol a nivel turístico. La ronda andaluza empezó a tener escalas habituales en Granada, Córdoba, Cabra, Huelva, Cádiz o Málaga, donde se hizo clásico el circuito del Parque
hasta 1977.

En 1959 participó el primer equipo de fuera de nuestras fronteras, el francés Urago. Dos años más tarde vencería el valenciano Angelino Soler, que aquel año ganaría la Vuelta con sólo 21 años. Aún hoy es el más joven en haberla ganado. En 1964, Rudi Altig se convertiría en el primer ganador foráneo en una gran edición marcada por el duelo entre el KAS y
el St.Raphael. También fue brillante el mano a mano que mantuvieron Ocaña y el potente Flandria en 1968, siendo este último más fuerte con la victoria final del belga Houbrecht.

Los años 70 fueron inestables. Se endureció la prueba porque tenía un recorrido muy “amable” y sufrió las trágicas muertes de Monseré, en Bélgica, pocos días después de su triunfo en Málaga en 1971, y de Manuel Galera en el Mojón un 14 de febrero de 1972. Además, el vencedor de esa edición, Koeken, daría positivo. A todas estas dificultades se le
uniría la no celebración en 1978 por dificultades económicas.

Por otra parte, la prueba asistió al dominio del belga Maertens, ganador en los años 74 y 75, y de 10 etapas; y al paso increíble del estrecho para cubrir etapa en Ceuta durante cuatro ediciones consecutivas. Además, la ronda de 1976 tuvo ocho etapas, récord.

La Vuelta estaba muerta, pero el catalán afincado en Utiel, Luis Cuevas, quien ya había formado parte desde 1974 del equipo organizativo, la reflotó como Ruta Ciclista del Sol. Desde su Sociedad Deportiva Publitel relanzó la carrera a nivel internacional, manteniendo sus fechas de disputa en febrero como primera vuelta por etapas del calendario nacional. Su nuevo recorrido abarcaba el sureste de Andalucía (zona de Fuengirola) e incluso parte del levante (Utiel), con una orografía en cada etapa muy suave y ligada a la costa. La carrera fue dominada por ciclistas centroeuropeos hasta la victoria de Eduardo Chozas en 1983, que rompió una racha de 11 victorias consecutivas extranjeras.

No obstante, en 1985, la Caja General de Granada se convirtió en patrocinador de la prueba e impuso el final de la misma en La Alhambra, que sucedía así a las levantinas Santa Pola, Gandía y Águilas. Aquella edición la vencería el alemán Golz, siendo segundo un tal
Miguel Indurain. Al año siguiente se volvió a transitar sólo por terreno andaluz, a excepción de la histórica entrada en Gibraltar, en 1986, en conmemoración del primer aniversario de la apertura de la verja. El vencedor final sería Rooks.

A partir de 1987 renacía la Vuelta Andalucía, apoyada en el sobrenombre que mantenía vivo su recuerdo: Ruta del Sol. De esta forma comenzaba una nueva y última etapa de la prueba, aumentando notablemente su prestigio y el poder de convocatoria en los albores de
cada temporada. En 1989 la nueva ronda andaluza plasmó su primer final en alta montaña
en el Santuario de la Sierra. En 1991 batió el récord de participants, con 22 equipos.

Durante los años 90 se incrementó la dureza de las etapas y se empezó a tener en cuenta las Alpujarras granadinas, del puerto de La Ragua a Sierra Nevada. A partir de 1994 dejó de ser la carrera inaugural del calendario español, en beneficio de la Challenge de Mallorca. Al año siguiente Sevilla volvió a ser el punto de partida de la carrera tras la primera edición, de 1925, en una Vuelta que vio reducida su número de días a 5. Durante
estas dos ediciones se impuso el malogrado ciclista Stefano Della Santa.
Grandes figuras como Indurain, Zulle, Cipollini, Rominger… coincidieron en la edición de 1996, con victoria del aussie Neil Stephens. En 1998 el polémico Lance Armstrong regresó a la competición tras el cáncer, disputando aquí su primera carrera. En 1999 la prueba fue
coto cerrado para los clasicómanos.

Bartoli, Vandenbroucke, Museeuw, Zabel (vencedor en 1997) y Tchmil. Una gran edición que obtuvo el reconocimiento de la UCI como carrera mejor organizada del mundo, con 99,5 puntos sobre 100.

Desde el año 2000 acuden a esta Vuelta grandes corredores en buca de sol, calor
y grandes y espaciosas instalaciones hoteleras. Son ciclistas que buscan rodaje para las clásicas de primavera. Freire, que ganó en 2007, Vainsteins, Bartoli, Erik Dekker, que venció en 2001, Rebellin, Van Pettegem… Y otros con objetivos más alejados como Pantani, Beloki, Tonkov, Escartín, Chava, Casero, Gotti, Galdeano, Vinokourov, Hamilton, etc.

En la lucha por la general es destacable la victoria de un currante Paco Cabello en la durísima edición de 2005, por delante del neófito Dani Moreno, cuando se impuso en una gran condición física y sin figurar en las quinielas. Ese año la ronda andaluza contó por vez primera con dos finales en alto, los inéditos de Comares y Cumbres Verdes. Tránsito por Sierra Mágina inclusive. No obstante, en 2003 ya se subieron la friolera de 18
puertos.

Otros currantes del pelotón que han vencido en la Ruta han sido Lastras, en el año 2008, Posthuma, en 2009, Rogers, en 2010, o Irízar, en 2011. Siempre con el beneplácito y permiso de sus respectivos líderes de equipo para brillar de forma individual.
Para celebrar sus bodas de oro en la edición de 2004, su continuó la progresiva tendencia a endurecer el recorrido, con la llegada al Santuario de Cabra, la presencia de la sierra jienense y la Alpujarra de Almería.

Como curiosidad, los 2.500 metros de altitud del final de la cuarta etapa de 1994 en Sierra Nevada ha marcado el techo histórico de todas las vueltas pequeñas por etapas del calendario nacional. Sólo en una ocasión la ronda andaluza llegó al macizo granadino. Los finales en alto más frecuentados han sido el Santuario de la Virgen de Araceli, en Lucena, y el Santuario de la Sierra, en Cabra.

La fusión de ediciones de 1986 la realizó la Junta de Andalucía y la Federación Andaluza
de Ciclismo, nombrándola de forma oficial “Vuelta Ciclista a Andalucía – Ruta del Sol”. Así, en 1987 se celebró la XXV Vuelta Andalucía -IX Ruta del Sol. Más adelante, en 1993, se unificaron las ocho ediciones de la Ruta del Sol y las 31 de la Vuelta Andalucía y quedó configurada la XXXIX Vuelta Andalucía – Ruta del Sol. Desde 1990, Jaén, la malagueña Benalmádena o Granada son las localidades más visitadas. La contrarreloj se
considera un rara avis en la prueba, ya que son pocas las etapas a disputar y mucho territorio por cubrir.

De 1975, año de la primera crono, a 1989 hubo de forma consecutiva una o dos cronos, incluyendo prólogos y dobles sectores. Pero desde 1990 sólo ha habido dos individuales (1993-94) y una por equipos en 1992. Desde su actual formato de cinco etapas han dejado de tener importancia. También es anécdota la fidelidad a la prueba del equipo holandés Rabobank (ahora Belkin). La estructura holandesa ha estado presente en todas las ediciones de la ronda andaluza desde 1987.

A lo largo de su historia siete corredores han vencido dos veces la carrera. Este honor lo comparten Freddy Maertens (74 y 75), Thurau (77 y 79), Golz (85 y 87), Chozas (83 y 90), Gorospe (84 y 93), Della Santa (94 y 95) y Valverde (12 y 13). Actualmente la carrera pertenece al UCI Europa Tour, con la categoría 2.1 desde la creación de los Circuitos Continentales por la UCI en 2005.

DANI FERNÁNDEZ

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *