Holanda en busca del podio de París

Hay países que tratan a sus ciclistas como auténticos ídolos y respetan a todo aquel que vaya sentado encima de una  bici. Uno de esos países tan aficionados al ciclismo es Holanda, en la que se forman grandes corredores que dejan sus hazañas por las carreras más prestigiosas del calendario internacional.

Holanda en los últimos años se caracteriza por tener corredores que van muy bien en la lucha individual contra el cronómetro y que además son muy buenos en las clásicas de primavera. Pero les falta un tipo de corredor el cual sí han tenido a lo largo de los años, y es el corredor que pueda luchar por victorias y podios en las grandes vueltas por etapas.

Hace ya mucho, desde que Erik Breukink se subiera, en 1990, al podio del Tour de Francia en París como tercer clasificado. Holanda tuvo años muy buenos con Erik Breukink que también subió al podio del Giro de Italia. Además siempre estaba en la batalla por un puesto en el podio de cualquier gran carrera que disputara. Desde que se retirara en 1997, la afición holandesa busca con fuerza un corredor que les permita soñar con pisar el podio de una grande o, por qué no, una victoria final. A finales de los noventa pusieron sus esperanzas en Michael Boogerd, pero este combativo corredor solo pudo acercarse consiguiendo un quinto puesto en el Tour de 1998.

La búsqueda continuó hasta que en 2008 apareció un joven escalador del conjunto Rabobank llamado Robert Gesink, en la Vuelta a España, subiendo siempre con los mejores en los puertos, y clasificándose séptimo en la general. Al año siguiente, también se encontró entre los mejores quedando esta vez sexto. Parecía que estaba preparado para debutar en la gran carrera francesa y su debut fue muy bueno quedando quinto en la general. En 2011 parecía que iba a ser su gran año, puesto que llegaba en una gran forma después de una gran preparación. Llegó el Tour y una caída arruinó una temporada que parecía la de la vuelta al podio de París por parte de los holandeses. Parece que 2012 puede ser el año de Gesink, aunque no hay que dejar de lado a su compañero en Rabobank, Bauke Mollema, que después de hacer una gran Vuelta a España en 2011 puede ser una de las sorpresas de esta edición del Tour de Francia, al subir bien y defenderse muy bien en las contrarrelojes.

Jorge Santos

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