Con la casi confirmación oficial de que el final de la Vuelta será en Santiago de Compostela, queda por definir qué papel tendrá Madrid, si es que se incluye en una carrera de la que se caería por primera vez desde el año 1986. ¿Crono? ¿Circuito en etapa en línea? Muchas incógnitas por despejar el día 11 de enero.
Aún por confirmar de manera oficial, la capital recibirá a los ciclistas el primer día de descanso. Anteriormente se celebrará una etapa de montaña que con casi toda probabilidad finalizará en la ya archiconocida cima de la Bola del Mundo. La cuesta de San Lorenzo del Escorial es la alternativa. Procedentes de Ávila, será un broche increíble a la primera semana.
El domingo aguarda Madrid. En sus calles se celebrará bien una crono o una etapa en línea, finalizando siempre en circuito. Si la crono no se celebra en suelo madrileño, todas las papeletas serían para Toledo, muy probablemente en el recorrido, o Aragón, donde se celebrarán tres etapas. Una de ellas finalizará en Formigal, donde se impuso el joven Warren Barguil este mismo año.
A partir de ahí comenzará la parte dura y decisiva. La durísima Camperona, los Lagos de Covadonga, como ya anunciáramos semanas atrás, y Farrapona -etapa reina-, que regresa tras tres años de ausencia. Ponferrada enlazará con Galicia, donde se celebrarán cuatro etapas. La penúltima, con final en el durísimo Ancares, ascendido por su vertiente más dura, y la crono final de unos 20 kilómetros dilucidarán quién es el ganador.
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