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Net-App, equipo Tour

Tras su magnífica Vuelta en 2013 le ha llegado la hora de saltar al mejor escaparate mundial del ciclismo, el Tour de Francia. Con un buen ramillete de nombres, acuden con el objetivo de que no sea un paso fugaz, de demostrar su seriedad como proyecto. Una iniciativa que surgió en 2010 con la creación del equipo, que en el año 2012 cobró una mayor envergadura gracias a la fusión con los británicos del Endura, aunque la licencia de la escuadra ha sido siempre alemana.

Konig se erige como el líder de la ilusionante formación. Octavo en la pasada Vuelta, se llevó el triunfo en Peñas Blancas, donde se le vio con motor para grandes cosas en las vueltas de tres semanas. Añadido al talento de David De la Cruz y a la experiencia de Tiago Machado o Jan Barta, los novatos se presentarán en la línea de salida de Leeds con garantías de
éxito.

Leopold Konig es uno de los aspirantes a sorpresa del inminente Tour. Noveno en la pasada Vuelta, dejó claro que vale para grandes empresas. Procedente del equipo PSK Whilpool, ya coincidió con su compatriota Roman Kreuziger en el Mundial junior de Verona, que caería del lado del actual corredor del Tinkoff-Saxo. Una vez ya en Net-App, se clasificó segundo en la Vuelta Austria y tercero en el Tour de l’Ain. En 2012 fue 3º en el anotó un triunfo parcial en la Vuelta a Gran Bretaña. En 2013 se hizo con la etapa reina del Tour de California. Un buen corredor con la sangre fría de la escuela checa. Un valor seguro que si no sufre algún percance, estará en la pelea.

La pareja Barta y Huzarski
Todo comenzó en el año 2012, en el que fueron invitados al Giro de Italia. Causó un gran revuelo, sobre todo en Italia, debido a los escasos resultados del equipo en su corta trayectoria, dejando fuera de la corsa rosa a más de un conjunto transalpino. Net-App no
tuvo un buen resultado global en aquella edición, pero obtuvieron dos segundos puestos a cargo de Barta y Huzarski. Poco antes, en marzo, lograrían la primera victoria al lograr las
dos primeras posiciones en la Setmana Coppi e Bartali, ganando además la crono por equipos. Tras la gran Vuelta 2013, repetirían una bonita historia, haciendo coincidir ambos una larga cabalgada en el Mundial de Florencia, donde pese a no compartir equipo, lucharon durante 200 kilómetros bajo la lluvia para intentar ser protagonistas de una carrera en la que dejaron un sello épico y la imagen de compañerismo que tan bien les ha funcionado entre ellos.

De la Cruz: hay ciclista

El corredor catalán, nacido en la localidad de Sabadell, es uno de los nombres que suenan con más fuerza para el futuro próximo del ciclismo español. Antes de adjudicarle esa carga, habrá que ver si confirma lo que nos mostró en la pasada Vuelta o lo que ha dejado ver en la etapa reina del Tour de California. Buen escalador y combativo, ha llamado la atención el hueco que ha podido conseguir en la élite.

Una progresión que empezó en el español Caja Rural, que le sirvió de trampolín para un gran fichaje que se traducirá en el debut de David en el Tour de Francia, todo un sueño para un ciclista que ha surgido en uno de los momentos más complicados del pelotón español. De hecho, si lo ha conseguido es debido a la calidad que atesora y a que tienen dentro del equipo una fe indudable en sus posibilidades. Que la tranquilidad y la evolución natural le dé mucho éxito, que falta hace a nuestro ciclismo.

L.S.

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