Loic Chetout se impuso en la Vuelta a Bidasoa con un generoso ataque en Erlaitz que le catapultó al triunfo final en el paseo Colón. Por el primer kilómetro del descenso del Castillo del Inglés (como también se conoce al puerto de Erlaitz), Chetout pasaba, apretando los dientes, como alma que llevaba al diablo. A pesar de que un grupo de cuatro unidades le pisaba los talones, el de Baiona no dudó en ningún momento y, gracias a un golpe de pedal poderoso, fue capaz de mantener la diferencia en el sinuoso descenso y los posteriores kilómetros de llano de camino a Irún.
Erlaitz rompió definitivamente una carrera que tuvo un marcado acento italiano. En la primera etapa, los Colpack dejaron claro que no se habían acercado a la bahía de Txingudi de turismo. Un triplete encabezado por Iuri Filosi les permitió conseguir el primer triunfo de etapa y el maillot amarillo.
Al día siguiente, la Vuelta a Bidasoa afrontó otra de las dificultades más tradicionales de la prueba: el alto de Jaizkibel, donde volvió a quedar en evidencia que cada vez rompe menos la carrera. Los ataques de diferentes corredores dejaron el grupo principal en unas 12 unidades entre las que el maillot amarillo no sólo fue capaz de defenderse, sino que aprovechó los kilómetros finales para vencer y aventajar a sus rivales en 7 segundos.
En la terera etapa la Vuelta al Bidasoa salió de su comarca para finalizar en Orio. Sobre 91 kilómetros en los que destacaban los altos de Etumeta y Orio, Filosi mantuvo el maillot amarillo pero descubrió cierta debilidad en sus rivales. Así se lo confesó el posterior vencedor de la prueba, Chetout, a su amigo Carlos Barbero: “el italiano estaba mal en el puerto duro”. La etapa fue a parar a manos de Marc López, que estrenó su palmarés esta temporada y consiguió para su equipo, Lizarte, un triunfo importante.
Con las espadas en todo lo alto, la última etapa, como hemos comentado, volvió a dejar patente que en los 4 kilómetros al 10% del puerto de Erlaitz no hay caretas que valgan. Chetout apareció entre la densa niebla que se había formado en las Peñas de Aia para mostrar su fortaleza. Así, brillando con luz propia, el francés fue capaz de rodar en solitario los últimos 15 kilómetros para inscribir su nombre al lado de importantes ciclistas como Txomin Perurena, Luis Ocaña, Peio Ruiz Cabestany, Abraham Olano, Carlos Sastre, Chechu Rubiera o Andrey Amador.
Texto y ph: Pedro Ceinos
Tenéis más vídeos en el canal oficial de Youtube de la Bidasoa Itzulia. De momento están el del primer día (el que habéis publicado), el del segundo y el del tercero. Y hoy se subirá el del cuarto día.
Gracias por la difusión!!