“Ocaña”, el libro, ocupa en los últimos meses un puesto destacado en las estanterías de todos los aficionados al ciclismo, igual que Ocaña, el hombre, nunca debió abandonar ese protagonismo en nuestra memoria. Todos le debíamos este merecido homenaje a un ciclista irrepetible, que vivió una época muy difícil, aquella España oscura y desagradecida para con los que conseguían escaparse de esa oscuridad, sobre todo si lo hacían en el extranjero.
Carlos Arribas ha convertido al hombre en leyenda al “novelizar” su vida. Por muy ajenos que nos parezcan los paisajes y sobre todo los paisanajes descritos, no hace tanto, en realidad hace bien poco, aquella era nuestra realidad y personajes como Ocaña, nuestros héroes. Como tantos otros, la única manera de escapar a aquella condena fue la emigración, como otros, la manera de huir de una vida miserable, fue el esfuerzo casi sobrehumano, fue la resistencia al dolor.
Ocaña es la biografía de un hombre y también la escenografía de una época.
Esta es la historia de Luis Ocaña, el ciclista, el campeón, un maldito del deporte español, escrita por primera vez en castellano 40 años después de la victoria del genio de Priego en el Tour y al cabo de 20 de su desaparición. Una historia que marcó a toda una generación, la que se hizo mayor durante los últimos años del franquismo y los primeros de la Transición, inmersa en un paisaje emocional teñido por el heroísmo y la tragedia de aquel personaje enigmático, fascinante y contradictorio. Una historia explicada como nunca antes: la novela de una vida para una vida de novela.
Este es es el último título publicado, por el momento, de la editorial Cultura Ciclista, responsables de la revitalización del género desde hace unos años, y gracias a quienes podemos encontrar en nuestras librerías magníficos textos hasta ahora inéditos en castellano.
